¿Cómo evitar hacer una obra para sustituir una tapa de arqueta estanca?

«Quiero evitar hacer una obra para sustituir una tapa de arqueta estanca» Una queja relativamente frecuente de quienes realizan labores de mantenimiento y trabajan con tapas de arqueta estancas es que no se pueden abrir. Las consecuencias son graves: para poder acceder a la arqueta no va a quedar más remedio que romper la tapa, lo que en muchas ocasiones va a derivar en una obra posterior para sustituirla.

Esta situación generará incomodidades más o menos grandes: si el registro está en un comercio es posible que obligue al cierre de la tienda durante unas horas o incluso algún día, con la consiguiente pérdida de negocio; si está en una zona común de un hotel o de un centro comercial o cualquier otro edificio de uso colectivo tal vez sea necesario aislar la zona. En todo caso, se generará insatisfacción en el usuario o propietario del edificio.

Hay que evitar hacer una obra para sustituir una tapa de arqueta estanca

La función principal de una tapa de arqueta estanca es impedir que por ella entre y salga nada, fundamentalmente, los malos olores de las redes de saneamiento. El hermetismo se consigue poniendo una junta de goma entre la tapa y el marco y cerrando el conjunto mediante unos tornillos que presionan la goma evitando el paso de líquidos y gases. No debemos olvidarnos de que es una puerta de acceso a la propia red, por lo que es fundamental que se pueda abrir y cerrar, con lo que los tornillos deben poder entrar y salir con facilidad.

Es fundamental el trabajo previo de instalación

Y es precisamente en los tornillos donde que hay que prestar más atención. Si durante la instalación de la tapa o mientras se realiza cualquier labor de mantenimiento entra suciedad en su alojamiento dañaremos la rosca irremediablemente. Forzando, tal vez se consigan introducir de nuevo; lo que es seguro es que no se podrán sacar. Para acceder a la arqueta habrá que romper la tapa y si el fabricante no es capaz de suministrar el repuesto, ya tenemos un problema grave con el cliente porque nos veremos obligados a tener que sustituir marco y tapa con la obra consiguiente.

Proteger las roscas te evitará problemas futuros

Proteger las roscas es sencillo: si una vez separada la tapa del marco volvemos a introducir los tornillos en su alojamiento evitaremos que entre suciedad. Es importante lubricar los tornillos en el momento en que se cierre definitivamente la arqueta para volver a poder abrirlos.

Es cierto que no todos los fabricantes son iguales y no es extraño encontrar tapas cuyos tornillos entran forzados incluso antes de instalarlas. Suelen estar fabricadas por los mismos que luego no ofrecen repuestos.

Hace unos días hablábamos de cómo la relación entre las empresas de mantenimiento y sus clientes se basa en la confianza. Una situación como ésta puede hacer que esa confianza se rompa.

En Maco fabricamos tapas estancas desde 1977. Fuimos pioneros y somos especialistas. Cuidamos los detalles para que nuestras tapas se puedan abrir. Y sí, ofrecemos repuestos. Puedes ver nuestra gama competa aquí.