Las lluvias torrenciales cada vez son más habituales. Esto está afectando en gran parte a viviendas y locales de negocio situados en zonas de con alto riesgo de inundación y a áreas con una red de alcantarillado infra dimensionada para estas nuevas circunstancias.
El caso de Ourense y la renovación de su red de saneamiento
Así lo veíamos en la noticia que publicaba la COPE y de la que nos hacíamos eco esta semana: el ayuntamiento de Ourense propone renovar la red de saneamiento del casco histórico, donde las fuertes lluvias provocan cada vez con más frecuencia la inundación de locales y comercios.
En el artículo se preguntan: “¿Quién va a querer abrir un negocio en la calle Cervantes si ya sabe que a poco que llueva con intensidad se va a anegar el local?” o “¿Quién va a comprar o alquilar un piso en la calle Colón si a poco que llueva con intensidad tendrá que salir nadando?” La respuesta es obvia. Nos consta que el de Ourense no es un caso único.
Cuando la red de saneamiento no es capaz de desahogar las precipitaciones
Cuando llueve con mucha intensidad la red se satura, colapsa, y esto genera un reflujo de agua que puede llegar a entrar en nuestro local. En otras palabras, si el agua no fluye por el alcantarillado acabará saliendo por algún sitio, como, por ejemplo, por las tapas de arqueta del interior del establecimiento.
Las consecuencias pueden ser graves, tanto en viviendas como en locales comerciales: los daños materiales provocados por el agua, los gastos derivados de la limpieza y las obras de reparación, la pérdida de recuerdos que ningún seguro podrá compensar jamás, etc. Pero en el caso en concreto de los locales de negocios, las inundaciones pueden suponer una mayor amenaza ya que el inevitable cierre temporal supondrá una pérdida de ingresos y tal vez de clientes.
Según advierten los expertos, el cambio climático va a hacer que padezcamos este tipo de fenómenos meteorológicos extremos con mayor frecuencia e intensidad.
Las tapas de arqueta estancas evitan inundaciones
En este tipo de situaciones, y hasta que se acometa la reforma de la red pública, una buena tapa de arqueta estanca puede ser clave. La norma EN 1253 establece los requisitos que deben de cumplir las tapas de arqueta de los edificios, prestando especial atención a su resistencia y a su estanqueidad. Las tapas que superen los ensayos de la clase Bt impedirán la salida de las aguas residuales en caso de una sobrecarga del sistema de drenaje para una presión de 0,5 bares. Si quieres saber más sobre esta norma, puedes visitar esta entrada de nuestro blog.
De todas formas, conviene recordar que una correcta instalación de la tapa también es fundamental para que ésta cumpla con su labor y es que una tapa estanca no se instala como una convencional. Te invito a que revisites este artículo.
En Maco fabricamos tapas estancas desde 1977. Nuestras tapas estancas permiten mantener la arqueta localizada, accesible y herméticamente cerrada. Contribuimos a aumentar la salubridad de los edificios, evitando la propagación de plagas y agentes infecciosos. Mejoramos el confort y ayudamos a muchos negocios grandes y pequeños a retener y atraer clientes, que no se quejarán de los malos olores de sus puntos de venta. En Maco, acabamos de presentar nuestra Gama 600 000, una tapa de arqueta estanca rellenable que ofrece protección frente al reflujo. Supera los ensayos de la Clase Bt. Su profundidad de relleno, de 4 cm, hace que la podamos revestir casi con cualquier material. Quedará perfectamente integrada en el entorno, sin afectar a la estética del local.